Te vi.

Fue ese día, cuando salí de casa y te vi, alrededor de todos tus amigos, y no puede evitar mirarte a los ojos. Permanecimos con la mirada entrelazada unos momentos, y ese fue el momento más mágico que sentí, me sentí increíble, cada vez que recuerdo ese momento, sonrío como una tonta, recordando y recordando esos ojos marrones junto los míos. Confusa me dirigí allí y os salude con un inaudible hola, y te volví a mirar, y tu me mirabas, y yo en ese momento caí a tus pies. Sonrío con esa tonta sonrisa, y me gusta esta sensación.
Hablé contigo, te intenté convencer, pero no te dije nada de esto, te asustarías, y no es tiempo...
Disfruto hablando contigo y me haces sentir de verdad ésta felicidad, es solamente la excitación que siento al hablar, la emoción...
Lo sé, soñé con otro, pero debes saber que también lo hice contigo, fueron dos partes, dos bonitas partes, y siento toda esta confusión, pero no estás aquí y no puedo verte...
El otro también me hace sonreír, pero no es como tu, si tuviera el poder de elegir, te elegiría a ti, con cada conversación te lo demuestro y quiero que sepas que te aprecio...
El otro es una tontería pasajera, aunque tu quizá también lo seas... pero de verdad me haces sentir bien, me haces sonreír con cada palabra escrita, cada vez que te recuerdo, tu voz...
Te vería si pudiera todos los días, y sería para mi, mi sueño cumplido...